Abro la ventana;
un sol radiante;
trabajo un poco;
la luz me mira a través de la ventana;
decido dejar el trabajo para más tarde y dar un paseo;
antes me meto en la ducha;
salgo limpito y acicalado;
me asomo a la ventana;
unas nubes grises amenazan lluvia.
C’est comme ça, cuesta acostumbrarse, a mi me ha pasado algo parecido hoy, la proxima vez deja la ducha para despues. Lo peor será cuando durante una semana no veas el sol, pero si aguantas hasta abril, enternderas la joie de vivre en esta ciudad despues de hacer el oso invernal ;-).
te quejas de vicio..la lluvia mola muchísimo. Lo que pasa es que ya se te ha olvidado el sol justiciero de la ciudad imperial.
y el día ha terminado pasado por agua efectevimante. Pero ha empezado con un sol radiante 😀